Cuando una de las empresarias más importantes del país golpea tu puerta (otra vez) para pedirte otro branding, tú le abres. A lo largo de la existencia de Studio Pólvora, hemos tenido varios clientes, tanto nuevos como recurrentes, pero muy pocos tan constantes como Marisa. Y en esta ocasión, nos buscó con la misión de diseñar su marca personal. Ya nos conocen, nos gusta crear marcas y mascar chicle … y ya se nos acabó el chicle (insertar música épica y una explosión).

​

Siempre que trabajamos con Marisa hay dos constantes. La primera es que confía en nosotros al darnos libertad completa para diseñar la marca. La segunda es que tenemos que resumir conceptos completos en una imagen (anoten eso porque será importante en otro proyecto). Para la creación de su marca personal como María Isabel Parra Cáceres, decidimos irnos por un logo más escrito a mano y combinarlos con una cromática muy variada de colores que van desde los amarillos hasta los rosas y azules. Todo esto combinado con figuras abstractas, ilustraciones y lettering que juntos crean una marca que se siente fresca, irreverente, dinámica y muy viva; básicamente es Marisa trasladada al papel. Bueno, no literalmente al papel porque diseñamos en compu, aunque las ilustraciones sí las hicimos en papel así que tal vez sí es Marisa trasladada al papel… 

​

Y nos fuimos por la tangente, otra vez. Bueno, en resumen, toda la marca de Marisa funciona para crear un espacio seguro, donde ella pueda conectar con personas como tú. Ella sabe que hay momentos en nuestra vida en donde aunque todo parezca ir bien, podemos sentirnos desconcertados y ahí es donde necesitamos de alguien que nos entienda, nos presente una comunidad en donde podamos conectar desde el corazón.